José Luís Pérez. EP

Dos apicultores de Navia y Cervantes resultaron premiados en el concurso de cata a nivel gallego de Aga

La miel de Os Ancares está de enhorabuena. De los cuatro apicultores galardonados este año en el concurso de cata a nivel autonómico organizado por la Asociación Galega de Apicultura (Aga), dos de ellos son de la comarca. Se trata de José Luís Pérez Fernández, de Navia de Suarna, y María Isabel López Pérez, de Cervantes.

En el caso de la miel naviega, José Luís Pérez fue reconocido por un producto monofloral de castaño. Aunque este vecino de Navia retomó una actividad que había sido tradicional en su casa, la Casa Príncipe que también le da nombre a la marca de la miel, fue este año cuando se animó a separar la miel en base a su procedencia.

De esta manera, obtuvo un producto asociado en un 70% al castaño, aumentando un poco más el 50% de porcentaje de castaño que presenta la miel de sus colmenas.

Para Pérez Fernández, la zona es propicia para este producto, que ha llegado a moldear su paisaje. Para el año que viene, este vecino utilizará un cortín, esas estructuras de piedra circulares que protegen las colmenas e los ataques del oso, para poner sus colmenas, cedido por la familia Cancelo, de Murias de Rao. En su caso, la producción alcanza los 1.500 kilos al año, que distribuye en su zona y en alguna tienda de Lugo y del resto de Galicia.

También Isabel López Pérez tiene una producción semejante, en la aldea de Piornedo. En su caso, la miel galardonada tiene en el brezo su flor predominante, que se completa con la de la carqueixa y la del castaño, propias de la vegetación de la alta montaña.

Para ella, el hecho de que hayan sido galardonadas dos mieles de Os Ancares no es casualidad, sino que obedece a que se trata de una zona sin cultivos intensivos en la que no se utilizan pesticidas.

También en su caso, la recuperación de esta producción ligada tradicionalmente a su casa, la Casa Casoa, trasciende el producto. Su casa, una palloza de esta aldea de Donís, está presente en el etiquetado y es uno de los puntos de venta de la miel, que en la capital también se comercializa en algún establecimiento.

Para Isabel López, el trabajo de formación y asesoramiento de Aga ha sido esencial para obtener esta distinción y animarse a recuperar la actividad, al igual que para José Luís Pérez.

Fuente : www.elprogreso.es