Se trata de un túmulo de tierra de 16 metros de diámetro de cuyo cráter de violación -término con el que los expertos aluden a que la tumba fue saqueada- asoman cinco vigas de piedra que forman una cámara poligonal de metro por metro y medio. La asociación indicó no haber encontrado restos de la capa que debería haber cubierto esta construcción, y apuntan como causa más probable de la destrucción la búsqueda de tesoros asociados en la cultura popular a este tipo de construcciones.
Patrimonio dos Ancares indica que, hasta la fecha, la mámoa con dolmen a mayor altitud de Galicia era la de Marco Cavado, a 1.640 metros entre los ayuntamientos ourensanos de Chandrexa de Queixa y Manzaneda. La mámoa sin dolmen a mayor altitud continúa siendo la del Alto das Malladas, a 1.745 metros, en el ayuntamiento de Chandrexa de Queixa.
Por otro lado, en la parroquia cervantega de Quindous, en el sitio conocido como O Carballal, a 1.100 metros, el colectivo también documentó otra mámoa de 19 metros de diámetro y 1,70 de altura. También en este caso el túmulo fue destruido y, además, cortado por un antiguo camino. Está cerca de la necrópolis conocida como Pena dos Mouros, formada por cinco mámoas.
PETROGLIFOS. En el año 2015, el colectivo ancarés también documentó los petroglifos situados a mayor altura de Galicia en Cervantes, a 1.800 metros de altitud, en el Mustallar. Hasta ese momento, los catalogados a mayor altitud eran los de Arcas, a 1.774 metros de altitud, en Manzaneda.
Fuente : www.elprogreso.es